La cultura del Pan en Alemania

¿Sabías que en Alemania hay más de 300 tipos distintos de pan? ¿Conoces las ventajas del pan negro? ¿Qué ingredientes usarías para hacer un buen bocadillo?Si quieres descubrir más acerca de “la cultura del pan alemana” no te pierdas el siguiente post.

¡EMPEZAMOS!

Alemania es uno de los países con más consumo de pan del mundo, concretamente la media sale a 57 kilos de pan al año por persona. Tienen una extensa variedad de panes, ¡más de 300! se busca que sea nutritivo y contundente, y es un pilar en la alimentación alemana, ya que forma parte de su día a día, mañana, tarde y noche.

Una de las cosas que quizá más sorprenden al viajar a Alemania es comprobar cómo, dejando a un lado las salchichas, el pan es el centro de toda su alimentación. El ritmo de las comidas es muy diferente al español, tan sólo hacen una comida “fuerte”, normalmente, al medio día, así que buscan que sea lo más contundente y sabrosa posible. Para esto utilizan el pan.

Por ejemplo, un desayuno alemán “Frühstück” suele ser bastante consistente, como en el buffet libre de los hoteles, incluye pan con mermelada o Nutella, salchichas, queso, frutas, leche, cereales… Para comer “für essen” muchas veces cocinan asados al horno y como guarnición preparan una especie de albóndigas hechas con pan. Las cenas suelen más ligeras, en las que también el pan suele estar presente.

El pan es tan importante en la cultura alemana que prácticamente cada región tiene su variedad. La mayoría de ellas son procedentes de una elaboración artesanal que utiliza las mejores materias primas: harinas completas y semillas que le aporten un valor alto valor nutricional. Tan orgullosos se sienten en Alemania de la calidad y variedad de su pan que los artesanos panaderos alemanes quieren que forme parte del patrimonio inmaterial de la humanidad. Y no es para menos, hay panes integrales, blancos... y negros. Uno de los panes negros más populares que ha saltado de Alemania al resto de Europa es la variedad Pumpernickel. De hecho, existe una variedad del mismo en los países nórdicos e incluso en Estados Unidos.

En realidad el Pumpernickel, originario de la región de Westfalia, y no es negro sino de un tono marrón oscuro porque está hecho con harina de centeno integral poco molida. Su origen se remonta al año 1570. Tiene un sabor dulce por lo que es muy agradable para untarlo con mermeladas, o en sándwiches con fiambres típicos como el chucrut o carne en conserva. Aunque también admite la ensalada de pollo e incluso el salmón. Resulta muy apetecible, ¿verdad?

Hay recetas caseras para animarte a realizar tu propio pan Pumpernickel como por ejemplo esta que incluye más ingredientes a la harina de centeno, pero siempre será mejor probar el original viajando a Alemania. Será todo un descubrimiento.

Para terminar este post me gustaría dedicarle este artículo a la alemana Sonja Schubert, por compartir conmigo su pasión por el pan.

Si os ha gustado el post no olvidéis compartirlo por redes, también podéis dejar un comentario abajo.

¡Hasta pronto alemaños!